La historia está llena de edificios que prometieron cambiar el mundo… y terminaron en el cajón del olvido. Proyectos titánicos, monumentos descomunales y delirios arquitectónicos que, por falta de dinero, guerras, dictaduras o simplemente porque la física existe, jamás se levantaron. Algunos quedaron en cimientos, otros ni pasaron del papel, pero todos comparten algo: el potencial de haber sido icónicos. Aquí va la primera parte de ranking de los gigantes que nunca fueron, los rascacielos imaginarios y las megalomanías frustradas.
「10/10」Palacio de los Soviets, Moscú, URSS. 1937.
495 metros. Lenin en la azotea. Stalin tan comprometido que dinamitó la Catedral del Salvador para hacerlo. La URSS quería un coloso para aplastar simbólicamente a Occidente, pero la guerra dijo "ni lo sueñes". Lo poco que se construyó terminó siendo una piscina porque si no se puede tener el edificio más alto, al menos ten la alberca más grande. En los 90, la catedral volvió, porque la historia es un círculo.
「9/10」Monumento al Descamisado, Buenos Aires. 1951.
Un mausoleo de 140 metros para Evita, con su cuerpo embalsamado al estilo Lenin. Arrancó la obra, pero la dictadura de 1955 lo destruyó con tanto odio que hasta fueron a Italia a asegurarse de que ninguna escultura en proceso sobreviviera. Solo cuatro estatuas se salvaron. Para variar, Argentina destruyendo cosas en vez de terminarlas.
「8/10」Cenotafio a Newton. Étienne-Louis Boullée, 1784.
Una esfera de 150 metros llena de agujeritos que simulaban estrellas de día y la luna de noche. Básicamente, un planetario gigante para un cadáver. No se construyó porque en el siglo XVIII nadie estaba dispuesto a gastar una fortuna en una bola hueca, por más icónica que sonara.
「7/10」Hotel Attraction, Nueva York. 1908.
Una torre alienígena de 360 metros diseñada por Gaudí. Hermosa, imposible y cara. Nadie en Manhattan quiso pagar por un rascacielos que probablemente tardaría siglos en terminarse (hola, Sagrada Familia). En los 2000 alguien intentó revivirlo para el Memorial del 11S, pero quedó en idea. Como todo lo de Gaudí: inconcluso.
「6/10」Pirámide de Shimizu, Tokio. 2004.
2004 metros de alto. Una ciudad para un millón de personas. Ciencia ficción en versión PDF. Shimizu Corp. propuso este delirio pero resulta que ningún material en la Tierra puede soportarlo sin colapsar bajo su propio peso. Aún sueñan con hacerlo para el 2110, porque Japón nunca deja de intentar cosas imposibles.
「5/10」Monumento a Colón, Madrid. 1889.
Un globo terráqueo de 300 metros, más grande que la Torre Eiffel. Pensado para la Expo de Chicago y luego ofrecido a Madrid, donde incluiría una bóveda celeste con las estrellas tal como se veían en 1492. No se hizo porque se robaría todo el protagonismo del Oso y el Madroño, y eso sí que no.
「4/10」Aeropuerto Internacional de Texcoco, Ciudad de México. 2014.
El futuro aeropuerto más grande de Latinoamérica, cancelado a medio camino por corrupción, protestas y una consulta popular. En su lugar, México se quedó con una base aérea reacondicionada. Cambiamos un hub mundial por un aeropuerto con más tierra que vuelos. Prioridades.
「3/10」Torre Watkin, Londres. 1900.
Posiblemente uno de los mejores intentos de sobre llevar el complejo de inferioridad sin terapia: querían su propia Torre Eiffel y lanzaron un concurso para construirla en el Parque Wembley. Ganó una torre de 358 metros que, cuando comenzaron a construirla, resultó ser tan poco inspirada que se canceló en 47 metros y fue demolida en 1907. Hoy el sitio es el Estadio de Wembley. Perdieron una torre, ganaron un estadio. No está tan mal.
「2/10」Monumento al Nativoamericano, Nueva York. 1909.
Una estatua de 140 metros de un jefe nativo con el saludo de la paz. Un gesto de reconciliación simbólica. Fueron jefes indios de todo EE.UU. a la ceremonia de la primera piedra. Luego, nadie más se acordó del proyecto y fue olvidado tras la Primera Guerra Mundial. La ironía es inconfundible.
「1/10」Pabellón del Pueblo, Berlín, Alemania. 1939.
Hitler quería hacer de Berlín la capital del mundo con "Germania", y su cúpula de 250 metros sería el techo del planeta. Spoiler: los nazis tenían otros planes para su "Make Germany Great Again” más polémicos y todo quedó en planos. Y menos mal, porque estudios recientes dicen que su diseño habría provocado condensación interna y lluvia dentro del edificio. Imagina construir el símbolo del Reich y que termine goteando.